Al declinar el día te dorea L multitud del mal esclavizada. ¡Cuánto dolor, Señor, mientras venían! ¡Qué dulce paz, Señor, cuando marchaban! Nosotros, hoy, también vencido el día, Oh Salvador, tu bendición buscamos. Tú estás presente, oh bien lo sabemos; ¡Bendícenos, oh Salvador amado! Disipa tú cual nube nuestros ayes. Tristes, enfermos, los que no te amaron, Los que han perdido el amor primero, Su sanidad están de ti esperando. Hay orpimiendo cuidado mundanos, Dañinas dudas hay que prevalecen; Pasiones hay que despedazan almas Y que tan sólo tú dominar uedes. Cada palabra tuya da su fruto Y tu poder aun fluye al tocarnos... Tiende tus brazos y stos corazones Su santidad reciban de tu mano. -----Mba mifohaza re, henoy izao Pane, keď hľadím Chvalte Stvořitele svého Minnətdaram Sənə , Rəbbim Mon Dieu prête-moi l'oreille Ry Raiko o! Tariho ny zanakao, tīng wǒ xīn shēng Ей кутсал ърмак Хэл яриагаар Say So
Song not available - connect to internet to try again?