Más que la miel en mi boca sedienta.
De tus mandamientos he adquirido riqueza,
Al seguir tu Ley siento tu presencia.
A mis pies tu palabra
Mi guía y mi sostén,
En mi camino.
¡Oh, oh, oh!
Avívame, dame entendimiento.
Enséñame a guardar tu palabra
Así siempre tú mi delicia serás.
-----