¡Qué carga inmensa, oh Señor, Fue impuesta sobre ti! Tú padeciste por amor El mal que merecí. Me acuerdo de Getsemaní, De toda tu agonía allí; Pienso en tu grande amor por mí, Sufriendo en mi lugar. Cáliz de muerte y maldición, Henchido para mí, Tomaste con resignación, Bebiéndolo por mí. Dios mismo te desamparó, Para ampararme a mí; Tu sangre en don de expiación, Vertiste tú por mí. El rostro Dios de ti apartó, Para aceptarme a mí; Por tu dolor, Jesús Señor, No hay ira para mí. -----mydly - tẖmr sẖfạh 3 Sen kúshtisiń In(evitabil)mente Єдиний ạ̉ḥbk yạ sydy Noche De Paz Yesu Mai Ceto, Ni Ya Ke So La mia via Siunaa mua مهما كان الحال
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